22.4.12

Un beso se convierte
en un acto revolucionario
cuando se da con los ojos abiertos
desde la conciencia del deseo.

20.4.12

Un pequeño esfuerzo

¿me pides a mí un pequeño esfuerzo?
¿a mí?
que soy de la generación del 50% de paro,
del uno de cada dos a la puta calle
del "tú estudia y llegarás a algo"

¿se lo pides a mi padre?
¿a él?
que cuando hubo bonanza
nadie se acordó de los cojos
y ahora todos nos olvidamos de ellos

¿se lo pides a mis abuelas?
¿a ellas?
mujeres de pensión no contributiva
porque es cierto, no cotizaron,
simplemente estuvieron aguantando un país
soportando, levantando este país
de dictadura y miseria.

¿o quizá se lo pides a alguna de mis hermanas?
la que acaba de descubrir
que ya están convocadas las becas
para las escuelas infantiles privadas,
pero no habéis sacado las públicas
o la que se encontrará hacinada,
con menos maestros cada vez
hasta que acabe su formación.

El único esfuerzo que vamos a hacer
será expulsaros.
Y no será pequeño.

12.4.12

República de la Risa

Vamos a construir una República
de la risa.
Quiero reírme con mis compañeras
en las calles, en los bares,
en el curro,
en la Universidad.
Expulsaremos con carcajadas
a los borbones
de su trono.
Comenzamos una revolución risueña
y combativa.
Porque ni un paso atrás
en nuestros derechos
tenemos la obligación de proclamar
la alegría.
La República.

6.4.12

Morriña

Voy a decir
que siento nostalgia de tus brazos
aunque no me guste repetirme
en los poemas
-al menos no demasiado-.
Y digo nostalgia de tus brazos
porque cambio de postura
y me abrazas.
Te giras tú
y poso mi mano en tu cadera.
Aplasto tu almohada
y nos alejamos los milímetros imprescindibles
para saber que estás ahí.
Me desvelo, mi cuerpo te busca,
tu sincrónico ronquido
me confirma que ahí sigues
y te abrazo.

4.4.12

La Revolución,
esa que se escribe con mayúscula,
debe de ser algo parecido
a los tricolores abriles ripenses.
Lágrimas de compañerismo
y abrazos.
Las revoluciones,
esas que son tantas
que nadie las leerá en los libros,
son los cambios pequeños,
discretos como la niña que aprende a leer.
Nadie les da importancia
y serán
las que cambien el mundo.

3.4.12

Aprovecha la oscuridad
de la cama
para sonreír sin que nos demos cuenta.
Cuéntame esos secretos
que se ocultan.
Disimula,
hazme creer que no conoces mi cobardía
y confía en mí.
Perdóname los insomnios inquietos.
y no me preguntes por esa nostalgia
que siento
por tus brazos.
No existe carcajada imposible
locura adolescente
provocación a deshoras
ni lucha inútil.

2.4.12