24.11.09

LA CALLE Y LA NOCHE TAMBIÉN SON NUESTRAS

Van ya cinco años desde la aprobación de la Ley Orgánica de Medidas de Protección Integral contra la Violencia de Género y las cifras de asesinadas a manos de sus parejas o exparejas, lejos de reducirse, incluso se incrementan. En lo que va de año y con fecha del 31 de octubre, son 49 mujeres las que pasan a engrosar estas negras estadísticas.

Desde Mujeres de IU-Comunidad de Madrid, queremos denunciar la ineficacia de una ley que desde su inicio, nació sin una ley de acompañamiento presupuestario que garantizara la inversión necesaria para las medidas planteadas. Una ley que está teniendo serias dificultades para su implantación dado que ésta se ha dejado al arbitrio de cada Comunidad Autónoma, observándose muchas desigualdades dependiendo de la Administración responsable. En el caso de comunidades como Madrid la situación es mucho más insostenible, pues ha habido una dejación total a este respecto hasta llegar a la situación actual. Se han suprimido las medidas de control y vigilancia a los maltratadores por su ineficacia. Ineficacia que por un lado tiene su explicación en la estrategia privatizadora del Gobierno de Esperanza Aguirre, pues la gestión de estas medidas era responsabilidad de una empresa privada. Es intolerable que uno de los mayores problemas que nos afectan a las mujeres en la actualidad, un problema que tiene que ver con el aseguramiento de nuestra propia vida, no sea una de las prioridades de las distintas administraciones. Como intolerable es que se haga bandera de la misma cuando no se están aplicando las medidas suficientes para superar este problema.

Una Ley con muchas carencias que tienen, no sólo que ver con la falta de fondos económicos, sino también con las definiciones de las propias medidas. En su articulado no se refleja ninguna medida específica de concienciación y sensibilización hacia los hombres, agente clave en la superación de la violencia. ¿Cómo es posible que no exista una reflexión seria en la que, lejos de criminalizar a nadie, se identifiquen elementos específicos hacia los hombres?

Una Ley que, a pesar de su nombre, no entiende la violencia machista de una manera integral, sino como un problema concreto, lo que le lleva a no conectar los distintos elementos que hacen que ésta perviva. Pues la violencia machista va mucho más allá del maltrato contra las mujeres, sin duda su cara más terrible. La violencia machista es un problema estructural, y como tal está inserto en todos los ámbitos de la sociedad. Tiene que ver con la propia definición que esta sociedad hace de las mujeres y que se esfuerza en perpetuar mediante el bombardeo mediático de estereotipos, así como tiene que ver con la definición que hace de los hombres. Tiene que ver con los roles que se reproducen desde los primeros ciclos de la educación, en la que las mujeres sólo aparecemos como dependientes y nunca como sujetas de acción y de creación. Tiene que ver con la invisibilidad a la que tenemos que enfrentarnos constantemente para que no caigamos en el olvido. Tiene que ver con los constantes intentos de apropiación de nuestra sexualidad como mujeres, definiendo la misma para hacerla funcional a las necesidades masculinas. Tiene que ver con las definiciones que se hacen del amor y de las relaciones, en las que la posesión del uno y del otro acaba siendo el elemento central.

Todo esto construye un imaginario, construye un modo de entender la realidad que nos afecta a las mujeres y a los hombres, y es ahí desde donde hay que trabajar. Hablamos de subvertir un orden de cosas. Un orden de cosas que permite que exista el asesinato, porque “la maté porque era mía”. Así como permite que existan muchos otros crímenes, como las violaciones. Que nos sitúa a las mujeres en una situación de mayor vulnerabilidad en tanto en cuanto se nos objetualiza.

Y esto no significa que seamos víctimas. Todo lo contrario. Desde Mujeres de IU Comunidad de Madrid, queremos reivindicar nuestro papel fundamental en el desarrollo de las sociedades. Nuestra capacidad para intervenir en todos los ámbitos y en todos los niveles de la sociedad. Porque mientras que se siga pensando en términos asimétricos, en términos de contrarios irreconciliables, seguiremos sufriendo la violencia que denunciamos.

Por eso este día, como todos los días de nuestra vida, queremos sumarnos al rechazo frontal y absoluto a cualquier tipo de violencia contra la mujeres. Por eso desde Mujeres de IU Comunidad de Madrid no cejaremos en la denuncia e intervención frente a las situaciones que sustentan el patriarcado. Porque lo personal siempre ha sido y es político:

LA CALLE Y LA NOCHE TAMBIÉN SON NUESTRAS.

1 comentario :

Angel dijo...

y tantas carencias te lo digo yo leire que sé de lo que hablo, un abrazo. voltios.